Reportaje sobre el pintor Mohamed Sciddel. Tercera y última parte
Eterno peregrino
Aunque el estatus migratorio y las reticencias locales de
Mohamed Sciddel limitaron su campo de acción e influencia en la ciudad, no se quedó
con las manos cruzadas.
Además de formar en 2005 el Grupo Mehrgan con los alumnos
a quienes enseñaba a pintar, en 2009 intentó formar un Núcleo de Grupos
Culturales.
“La idea era que los artistas tuvieran un peso en la
sociedad, reunidos. Convocó a diferentes grupos culturales en Uruapan que
tenían como una tradición de estar actuando aquí en la ciudad para poder tener
ideas que pudieran influenciar al gobierno y a la misma sociedad.
“Trataba de eliminar cosas egoístas como hacer cosas por
conveniencia económica, política, religiosa… esas cosas dejarlas a parte para
que los artistas, independientemente de su creencia, estilo o lo que sea,
pudieran actuar juntos”, recordó –en entrevista para PROVINCIA- Matías Álvarez
(MA), joven pintor uruapense, alumno de Sciddel.
“Más que el hecho de la técnica creo que eso era lo que
él consideraba que el artista debía hacer: Tener un peso social, tener peso
político”.
-¿De qué disciplinas se iba a integrar el núcleo?
(MA) Literatura, danza, música y otro grupo de plástica,
eso en un inicio, la intención era que el núcleo fuera creciendo y que abarcara
otras disciplinas.
Eloy Álvarez (EA), también pintor y miembro del grupo
Mehrgan, recordó que estaría involucrado el grupo llamado Uruapan visto por los
uruapenses, conformado por varios promotores culturales.
“Lo del núcleo era una idea para motivar a los mismos
uruapenses a hacer cosas, además por la edad que tenía decía ‘no puedo hacer
todo lo que quisiera, pero ustedes sí, ustedes tienen que hacerlo’”, dijo
Matías.
Los jóvenes creadores señalaron que a pesar de los
esfuerzos ganó la apatía y no se consolidó el núcleo, sin embargo, es una idea
que no quieren dejar morir.
Espacio de luz
Una construcción que data del siglo XIX y con 12 mil
metros cuadrados de extensión se convirtió en el lugar ideal para que el
trabajo de Mohamed Sciddel y el de sus alumnos ‘floreciera’ en las márgenes del
Río Cupatitzio.
La Antigua Fábrica de San Pedro, ubicada en el Centro de
Uruapan, está actualmente dividida tanto en propiedad como en uso: La mitad izquierda
es de la familia Illsley y la de la derecha de una familia uruapense.
En 1894 el lugar inició su producción de textiles y luego
de parar a causa de la convulsión de la Revolución Mexicana retomó el trabajo en
1956, labor que actualmente sigue pero en una escala mucho menor.
Una parte de la enorme construcción –la de la familia
uruapense- es ahora un centro de convenciones y salón de fiestas, pero la que conserva
su uso original tiene destinada una sección para el arte y más específicamente para
la pintura.
Fue en ese lugar que el maestro Sciddel encontró la
materialización de lo que significa el nombre que le dio al grupo: Mehr es luz, amor y fraternidad,
y gan, lugar o sitio.
Erik
Sepúlveda (ES), también alumno de Sciddel, comentó que la familia Illsley
fungió como mecenas del maestro. “Siempre estudiamos aquí y nunca se
cobró una renta, existe el salón todavía y no se cobra renta, es altruismo puro
y duro”.
“Para
el maestro siempre era (importante) reconocerle a ellos, todo lo que lo
ayudaron a él para el grupo”, recordó Matías.
“Dos de las exposiciones fueron un homenaje a la familia,
al señor Walter, cuando todavía vivía, (y) otra de las exposiciones fue en
homenaje a la señora Bundy, estaba muy agradecido con ellos”, añadió Eloy.
Retoman el objetivo
Con el apoyo de los Illsley y del resto de integrantes
del grupo Mehrgan es que los jóvenes pintores entrevistados quieren retomar de
cierto modo la idea del Núcleo de Grupos Culturales y convertir totalmente a la
Antigua Fábrica de San Pedro en ese lugar de luz, amor y fraternidad.
“Lo que queremos hacer aquí precisamente viene de ahí: Un
espacio cultural en el que se reúnan todos y que tenga un peso para poder
hacerlo, que tengan una actividad más allá de irse a su estudio a pintar”,
comentó Matías Álvarez.
-¿En qué etapa va el proyecto?
(MA) Va empezando, apenas se están dando las ideas,
estructurar, buscar también recursos -lo básico- y reuniendo a la gente que
pueda hacer, todos tienen cosas que hacer entonces es difícil encontrar quien
lo haga, quien se responsabilice de eso, la idea, desde mi punto de vista,
tiene mucho que ver con la idea que el maestro tenía.
(EA) La señora Bundy Illsley se motivó a eso.
(MA) La señora Bundy es la que ha estado tratando de
impulsarlo, pero está todavía en veremos, todavía no hay una estructura
completa pero sí está la idea de que sea un espacio cultural y que tiene que
ser un espacio donde haya actividad, por lo menos que en Uruapan no hay nada,
que sea un espacio así, de comunidad.
La idea que tienen ahora los integrantes del grupo
Mehrgan es hacer de la Antigua Fábrica de San Pedro un espacio en el que la
misma ciudadanía haga algo en pro de la sociedad a través del arte.
Además de lo anterior está proyectado que ahí mismo se
erija un museo dedicado a Mohamed Sciddel en el que se aborde la vida y obra
del maestro con todas las piezas terminadas y en proceso que dejó al momento de
su muerte.
“Así lo ofreció la familia Illsley, que aquí estuviera
resguardado su trabajo, como exposición permanente”, señaló Eloy.
Agudo observador
Los tres jóvenes pintores coincidieron al señalar que el
maestro Sciddel apreciaba y valoraba las manifestaciones culturales locales. “Lo
veía muy colorido, como una riqueza que le pertenecía al pueblo”, comentó Eloy.
“Consideraba a los artesanos casi como artistas”, añadió
Matías, “(aunque) hacía una separación entre el arte y la artesanía, sí los
consideraba maestros de lo que hacían. Tenía llena su casa de cositas, le
gustaba coleccionar piezas que consideraba hermosas”.
Erik dijo que el maestro Sciddel valoraba todos los
rasgos culturales de la ciudad, “era una persona que parecía alma en pena
porque de repente te lo encontrabas por ahí observando cosas, observaba cosas
que de repente uno le ponía mucha atención, él estaba, a veces más inmiscuido
en la vida que un uruapense mismo, porque estaba informado siempre de todo, se
interesaba, siempre”.
“Así pues, para lograr un cuadro, se requiere ver agudamente, sentir, observar, pensar para poder pintarlo”, anotó el maestro Sciddel en sus apuntes autobiográficos.
“Así pues, para lograr un cuadro, se requiere ver agudamente, sentir, observar, pensar para poder pintarlo”, anotó el maestro Sciddel en sus apuntes autobiográficos.
Mural Mi expresión del siglo XX que se encuentra en el http://www.cideg.org/SccidelFrame.htm
Comentarios
Publicar un comentario