Entrevista con los creadores de la revista literaria KRAFT
Rugidos literarios
León, Guanajuato Voces jóvenes resuenan desde el Bajío
mexicano. Un león ruge fuerte y claro desde lo alto de un arco para que no
quede duda de que el fomento a la creación literaria tiene un nuevo espacio.
Luego de varios meses de trabajo, el pasado 18 de
septiembre llegó el día esperado para la materialización —en este caso a través
del papel— de un proyecto que se convierte en un foro para los narradores,
poetas y cronistas de todo el país.
La revista Kraft, editada en León, Guanajuato, es el
primer proyecto de publicaciones periódicas de la Editorial Montea, con base en
la misma ciudad, e incluye textos de nóveles autores de todo México.
Esta publicación mensual independiente es la muestra de
que el Bajío mexicano mantiene su pujanza económica pero ahora también está
incluida la cultura entre sus productos de importación.
En entrevista para PROVINCIA, los jóvenes que integran el
equipo de la revista y la editorial hablaron sobre su proyecto que los ha llenado
de retos pero también de satisfacciones.
Azaroso
inicio
Lucrecia Aramoni (LA), directora general de la revista Kraft,
señaló que en el número 1 de la publicación se incluyeron nueve textos debido a
que la ilustración que incluye se redujo un poco de tamaño.
“Nuestra revista va a
tener un póster incluido, pero esta edición nos dimos la libertad de hacerla un
poco más pequeña para poder meter más textos porque no nos pudimos decidir. En
total son nueve y nuestra ilustración, solo por esta edición, bajó de tamaño,
pero fue porque es de uno de nosotros, entonces no había problema. Normalmente
la ilustración va a ser tamaño póster, esta es la única diferencia entre este y
otros números”.
El concepto de Kraft es el siguiente:
cada mes se lanzará una convocatoria con un tema en particular sobre el que
cualquier autor puede escribir y mandar su texto ya sea de narrativa, poesía,
crónica, entrevista o reportaje, a la par se lanza otra para ilustradores que
va sobre el mismo tópico.
Para el primer número la frase que debía regir a todas
las colaboraciones era: “La vida al azar”, y la respuesta fue muy buena:
llegaron 30 textos de 15 estados de la República y finalmente se seleccionaron
nueve.
—¿Se esperaban la respuesta que
tuvieron en la primera convocatoria?
Maricarmen Arena (MA) Yo creo que nos agarró de sorpresa,
te imaginas que cuando vas empezando vas a tener respuesta de conocidos, pero
que llegaran textos de gente totalmente extraña te alegra bastante. Esa es una
prueba de que algo estamos haciendo bien.
Adrián Martínez (AM) Fue parte también de esta comunidad
de revistas independientes que empezó a compartir desde la primera convocatoria
que llegamos a más de 15 estados, y al final tuvimos más de 30 participaciones
en la primera convocatoria y fue realmente impresionante. Ya cuando tuvimos que
leerlas todas para deliberar fue un proceso muy padre y quedamos gratamente
impresionados de la calidad y el rango de gente que llegó a participar.
—¿Qué fue lo que les resultó más
difícil del proceso de selección?
(AM) Usamos un sistema
anglosajón de análisis de textos que es por puntajes. Les dimos puntajes a los
textos y dividimos según los criterios que nos parecían más adecuados, desde
los contenidos, la estructura, la forma en que llegaron a nosotros, la relevancia
o cercanía que tenían con el tema, el impacto que podían causar. Fuimos
calificando entre todos. No fue una mesa redonda en la que todos nos peleamos
por el texto que más nos gustaba. Hubiera sido un caos.
(MA) Se nos hizo una forma muy simple y más objetiva y yo
creo que funcionó bien, fue rápido, fluyó.
—¿Cómo eligieron el tema?
(LA) Tenemos una lista como de 15 temas. Queríamos que
nuestros temas fueran distintos a lo común, queríamos que tuvieran una
característica de extrañamiento muy específico. Mágico pero no fantástico, que
fuera real, que pudiera abarcar temas cotidianos o vivencias o crónicas. Fue
interesante. Algunos temas que escogimos sí nos dan muchísima risa. Ya tenemos
elegidos de aquí a diciembre.
La vida al azar escogimos porque es un tema muy amplio
que puede pasar por todas las anécdotas y proyectar cómo a veces la gente
escoge esta forma de vivir sin sentido. ¿Por qué decidiste cambiarte de ciudad
y de novia? ‘Porque me lo dijo la suerte, tiré un volado’. Es muy interesante
explorar el tema y más en literatura.
(MA) Algo que
buscábamos mucho era darles el espacio creativo a las personas, es no marcarlo
tan definido y eso hace que lleguen un sinfín de opciones que ni tú mismo
pudiste haberte imaginado. Te damos una idea y que de ahí tu imaginación vuele,
sorpréndenos con lo que creaste a partir de una frase.
La segunda
convocatoria, que cerró el pasado 23 de septiembre, tuvo como tema la frase
“Entre líneas de horror” y también una gran respuesta y circulación en los
perfiles de Twitter y Facebook de la revista Kraft.
“Ya terminó la
convocatoria #2, superamos por mucho las colaboraciones del número pasado y ya
comenzaron a llegar textos de fuera del país. Gracias a todos”, publicaron en
Facebook el pasado 24 de septiembre.
Sobre el tercer
número, Adrián Martínez, director editorial, señaló: “Es un tema muy bueno el
tercero, nos tiene muy emocionados. El segundo fue Entre líneas de horror.
Queríamos hacer un énfasis en que el horror no es el miedo y el horror no es el
terror, son cosas diferentes esos tres conceptos y queríamos manifestar el
horror no desde el cliché de las películas que vemos o lo que todos estamos
acostumbrados. Esa palabra, cliché, tiene algo que ver con el siguiente número
pero no vamos a decir nada más”.
Iniciativa
propia
Lucrecia Aramoni comentó que Kraft
es en realidad el segundo proyecto de publicaciones periódicas de Editorial
Montea pero sí es el primero por iniciativa propia.
“El primero que hicimos
fue una revista empresarial que al final, después de hacer todo el maquetado y
la producción, no se echó a andar. Cuando ya hicimos todo ese proceso fue muy
pesado porque era un formato completamente distinto, eran 60 páginas, eran ocho
secciones distintas, entonces fue muy pesado para nosotros y sacar el prototipo
nos llevó a la conclusión de decir ‘¿por qué no hacemos un producto que sea
hecho por nosotros, por nuestra iniciativa y no para un giro que no nos estamos
adecuando tanto’”.
Y la respuesta a la
pregunta anterior resultó sencilla: una revista cultural. “Todo el equipo
venimos de una misma alma mater: la Universidad de Guanajuato de la carrera de
Cultura y arte. Era como ‘tenemos que hacer algo que nos apasione mucho más’ y
ya vimos que este formato lo podemos manejar y empezamos a hacer un equipo
mejor formado e hicimos una revista cultural, nos tomó un par de meses pero
creo ya está”.
—¿Cómo es el ambiente en León para
este tipo de publicaciones?
(AM) En León es una cuestión algo crítica porque no se
realizan muchos proyectos de publicaciones. Hay algunos ejemplos pero son
contados. Hay algunos fanzines que han salido a través de los años, existe la
revista cultural Alternativas, que es
totalmente institucional, han habido otras iniciativas, algunas antologías de
textos literarios… pero realmente la literatura y las publicaciones son algo
que no ha permeado en el Bajío.
Han habido algunas
publicaciones pero mueren. Existe el caso de Onomatopeya,
de Dédalo, que eran revistas independientes pero dependían
de apoyos institucionales, entonces ¿qué sucede? Cuando esa institución deja de
creer en el proyecto o simplemente cambia sus fines, los proyectos de
publicación ahí se quedan, no pueden avanzar.
Lo que nosotros
queríamos era hacer algo totalmente fuera de lo institucional, algo
independiente precisamente para no depender de instancias ajenas a nosotros y
tener toda la libertad de crear y de manejar esto no solamente en la ciudad o
el estado sino para que fuera algo nacional y que se viera que está hecho desde
León pero que es para todo el país.
Que la puesta de la revista Kraft
sea nacional desde un inicio habla de la ambición de este grupo de jóvenes y de
las ganas de realizar con éxito este y otros proyectos.
Maricarmen Arena comentó que la respuesta en general ha
sido positiva y de buenos augurios, “por parte del ambiente en el que nos
movemos ha sido mucho de apoyo. Por parte de las empresas al querer tratar de
enseñarles este nuevo proyecto ha sido una respuesta indecisa porque al ser un
producto nuevo no están acostumbrados a apostar por una cuestión como esta,
pero ha sido muy positiva también”.
Adrián Martínez añadió: “De la comunidad que se dedica a
la edición, a las revistas independientes y a escribir, creo que sí hemos
recibido mucho apoyo. Hay una cuestión de solidaridad muy creciente entre esta
generación de revistas independientes, de proyectos de publicaciones, de
editoriales jóvenes. Creo que sí hay mucho apoyo. Estamos creando comunidad,
estamos creando foro, nos estamos difundiendo entre todos y eso nos ha ayudado
bastante en todos los sentidos.
Maricarmen Arena abundó también en la respuesta que han
tenido en redes sociales, “se nota muchísimo como nos empiezan a compartir
revistas que tienen diferente concepto pero más o menos el mismo público.
Entonces es un dando y dando muy padre, no es como ‘es mi competencia, lo voy a
echar para atrás o no lo voy a compartir’, es todo lo contrario, a mí me
sorprende, se está creando una comunidad”.
Y la respuesta ha sido
muy buena tanto en Twitter como en Facebook. En la red del pajarito azul el
perfil de Kraft tiene un equilibrio casi perfecto entre seguidores
y personas a las que siguen (87/103), mientras que en Facebook el crecimiento
ha sido un poco más acelerado.
“En cuestión de tres
semanas tenemos 600 likes y hemos llegado a 5 mil personas en algunas
publicaciones, entonces ha sido realmente impresionante el boom que ha
tenido Kraft en redes sociales”, comentó Adrián Martínez.
Revalorar
el papel
Ricardo Vargas (RV), director de Diseño y Producción de
Editorial Montea, comentó sobre cómo fue que llegaron al formato y nombre de la
revista, tomado del material en el que está impresa: papel kraft.
“El papel queremos revalorizarlo, por eso usamos un papel
kraft que en general lo usas para empaques o envolturas y es muy resistente y
muy bueno”.
Los libros que edita Montea son entregados en paquetes
forrados de kraft con la impresión de su logotipo, algo que les marcó la pauta
para hacer algo diferente para su proyecto de revista independiente.
“Decidimos hacerla en
este formato porque nos parece adecuado, nos parece diferente, nos parece
explotable en cuanto a diseño y en cuanto a espacio para tener diferentes
secciones. Es bastante sobrio y no muy elaborado en el aspecto de que se ve
limpio, son trazos muy limpios, algunos pequeños detalles nada más, los
recuadros son las divisiones de los textos porque si lo dejamos todo amontonado
no se iba a entender”.
Vargas comentó que se
decidieron por un estilo limpio y con una tipografía no tan pequeña para que
fuera legible con facilidad y que también sea práctico. “Que lo puedas llevar a
donde tú quieras. No es una revista común, es algo totalmente diferente, que se
puede estar cambiando en cada número, es la idea, que tengamos esta libertad de
modificar el diseño en los diferentes números o las diferentes temáticas”.
—Han echado mano del Internet con muy buena respuesta y
resultado y están revalorando al papel, ¿cuál es su postura entre lo digital vs
lo impreso?
(MA) Estamos cubriendo lo digital y lo impreso. Además de
las redes sociales también surgirá el sitio web —ahora en construcción— que
tendrá unos contenidos diferentes aparte de los de la revista. Queremos darle
importancia a la impresa porque es nuestra tarjeta de presentación y es como
surgió la idea y ya después se vio la necesidad de ampliarlo un poco porque es
verdad que ahorita a donde llegas más es por el medio de Internet. Es nada más
esperar a cuando se suba la página y sorprender un poco con los contenidos
extras que tendrá. Se están cubriendo todos los aspectos, queremos que sea algo
redondo, algo completo.
(AM) Desde Editorial Montea nunca hemos tenido miedo a lo
digital o a lo impreso, creo que son plataformas que tienen posibilidades muy
diferentes y se pueden apoyar entre sí, no deben estar peleadas nunca. Podemos
hacer uso de las dos, solamente hay que tener el ingenio de manejar ambas sin
que una sea más importante que la otra, es una delgada línea de equilibrio pero
creo que hasta ahora la hemos sabido manejar bien y es una línea que seguiremos
haciendo.
(RV) Nosotros quisiéramos imprimir todo lo que nos
mandan, porque nos mandan muchos textos muy buenos y nos limitamos porque no
podemos meterlos todos, al menos no por ahora. Con las redes sociales y la
página es como ir de la mano porque lo que no veas aquí lo puedes ver en
Internet y viceversa. Es como complementar este proceso y que sea totalmente
redondo, no limitarse.
Mucha gente escribe y manda sus escritos, queremos darle
ese valor a la gente que se toma la molestia de escribir que si no sale en el
impreso va a salir en Internet. Son diferentes plataformas que tenemos pensadas
para hacerle ver a la gente que se valora su trabajo.
JOVEN, JOVEN, JOVEN
Editorial Montea y revista Kraft son proyectos jóvenes en
muchos aspectos. En primer lugar el promedio de edad de la gente que trabaja en
ellos es de 25 años; en segundo la empresa se formó el año pasado y en tercer
lugar la publicación acaba de presentar su primer número.
Pero la juventud de Montea y Kraft no es sinónimo de
limitación en sus alcances, objetivos, planes y deseos. La primera tiene ya
siete títulos publicados y están preparando otros tres que saldrán a la venta
antes de terminar este año, y la segunda tiene ya convenios de distribución en
Torreón (librería El Astillero), Guadalajara (en Palíndromo) y Guanajuato (Café
Antique, El santo café y El lechón ilustrado) además de en Cuernavaca,
Querétaro, Distrito Federal, Chihuahua, Tijuana y próximamente también en
Morelia.
Los espacios en los que ya se tiene convenio recibirán
mes con mes la revista Kraft, cuyos ejemplares son gratuitos. Maricarmen Arena
señaló respecto a este tema: “Hicimos la planeación de distribución en varios
lugares y hemos tenido también la invitación de varios sitios para
distribuirla, hicimos una planeación, este es el primer número, estamos un poco
a la tentativa de que puede funcionar. Nuestros objetivos principales son
cafés, centros culturales, restaurantes que apoyen a la cultura, librerías
independientes, nos estamos manejando un poco por la cuestión independiente.
Destacó que son lugares muy puntuales, “estamos buscando
calidad, es un tema dirigido a cierto público y buscamos lugares que se
especialicen en esas personas”.
“También teniendo en cuenta que cada uno de los
ejemplares está pensado para que no solamente se quede en una persona, es un
ejemplar pero puedes compartirlo con otras 10 personas. Eso creo que es lo que
hace falta pensar para las publicaciones, que no se quede nada más en un
lector, no pensar que tienes 3 mil lectores porque tienes 3 mil ejemplares,
puedes tener hasta 100 mil, hay que pensar en eso”, añadió Adrián Martínez.
—¿Sobre qué temas son los libros en el catálogo actual de
Editorial Montea?
(AM) Hasta ahora hemos tenido muy fuerte la línea de
investigación, realmente nuestros contenidos son de contenido humanístico pero
involucramos las artes y su investigación.
Tenemos libros de arqueología, una antología de
dramaturgia… Nos enfocamos en el género humanístico, con líneas de poesía y
narrativa que ahora están en desarrollo porque estamos haciendo una cartera de
autores. Queremos trabajar fuertemente con ellos y ofrecerles contratos y
opciones que realmente sean viables para ellos porque sabemos que publicar un
libro en México si no es de una forma institucional resulta bastante difícil —e
incluso institucionalmente a veces queda uno muy decepcionado—.
Queremos ofrecerles ese algo distinto, en este momento
estamos trabajando muy fuerte para que esta línea de narrativa y de poesía
pueda quedar bien afianzada para el siguiente año y este año nos dedicamos a la
investigación.
—Los tres títulos que van a publicar antes de que termina
el año, ¿de qué van a ser?
(AM) Hay un libro colectivo que es una reinterpretación
de unas leyendas mexicanas que ya verán después, hay otro proyecto de antología
de autores jóvenes y otro con una autor local. Son los que tenemos en puerta.
Con el libro del autor local vamos a inaugurar el catálogo de narrativa, que ya
vendrá el próximo año.
Adrián Martínez comentó además que el inicio de Editorial
Montea fue en parte un reto para Mauro Montesano, su director general.
“Empezamos cuatro personas, Ricardo Vargas, Mauro
Montesano, Jesús Zúñiga y yo. Mauro nos contactó, más como un reto personal de
su padre hacia él. Le preguntaban ‘si te gustan tanto los libros ¿por qué no
haces los tuyos?’. Entonces dijo ‘¿por qué no’, el chiste es lanzarse’. Se
lanzó y se formó la editorial. Fue un proceso de planeación algo largo pero
finalmente cumplimos con todos los requisitos: registrarnos en hacienda, en la
Asociación Nacional de Editores, en la Secretaría de Educación Pública, en
ISBN… fue un proceso largo. Posteriormente se empezó a agregar más gente y
también la rama de publicaciones periódicas”.
Ricardo Vargas añadió: “Estamos abiertos a la gente que
quiera participar. La idea es tener compromiso y casarte con la idea. Ha habido
muchas trabas y gente que dice que no se puede hacer pero mientras tú quieras
todo se puede hacer, no hay límites, todo está en que tú quieras hacer la diferencia,
ser de ese 5 por ciento de los estudiantes que hacen algo de verdad. En la
revista estuvimos abiertos a quien quisiera participar, no sabemos mucho
todavía pero estamos aprendiendo, haciéndolo”.
Maricarmen Arena, la anexión más reciente al equipo, dijo
que tanto Montea como Kraft son como un sistema abierto. “Yo lo puedo decir
porque soy la última en llegar. Somos un grupo de locos pero hay planificación
en nuestra locura, no estamos haciendo cualquier cosa, hay orden en nuestra
locura”.
Un grupo que, dijo, quiere demostrar que es posible trabajar en lo que te apasiona “y que puedes vivir de ello y que puedes salir adelante y sacar una revista y no morir en el intento”.
Un grupo que, dijo, quiere demostrar que es posible trabajar en lo que te apasiona “y que puedes vivir de ello y que puedes salir adelante y sacar una revista y no morir en el intento”.
¿QUÉ ES MONTEA?Adrián Martínez, director editorial de Montea, señaló que la empresa tomó su nombre de un término que se utiliza en arquitectura. “Es una proyección octagonal que es el proceso de llevar la idea del plano a una maqueta física. Montea es ese acto de transformar algo bidimensional a tridimensional. Es algo para nosotros muy sencillo, muy simple, como lo de Kraft, queremos llevar esas ideas a un libro, a que se publique, que pueda llegar a todos lados donde el autor lo desee”.
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